Una capacitación técnica bien orientada no solo permite un desempeño sólido en el cargo, sino que también impulsa el desarrollo de competencias con proyección de vida. En este artículo se destacan algunas aptitudes que, más que requisitos, se forjan en la práctica misma de la medición de hidrocarburos. Si el propósito es crecer, el camino comienza por apropiarse de aquellas que inspiran… y fortalecerlas con decisión. 
- Rigor técnico y analítico. Pensamiento crítico y resolución de problemas
Capacidad para interpretar datos, aplicar normas técnicas y tomar decisiones basadas en evidencia. Implica mucho más que aplicar fórmulas o seguir procedimientos. Significa abordar cada medición con una mentalidad crítica, precisión metodológica y respeto absoluto por los principios de exactitud y trazabilidad. Esta aptitud refleja un compromiso profundo con la calidad de los datos y la confiabilidad de los resultados. Capacidad para identificar desviaciones, proponer mejoras y asegurar la trazabilidad metrológica. Esta aptitud perfila roles que fácilmente pueden migrar a áreas de investigación científica o financieras. En ambas, la relación con funciones estadísticas y algoritmos especializados, amplían las posibilidades de desempeño y empleabilidad. También es apto para las personas que gustan de reparaciones mecánicas o de instrumentación que requieren ajustes muy precisos y de gran dedicación y paciencia. - Dominio de normativas y estándares internacionales
Conocimiento práctico de API MPMS, AGA, ISO, OIML, entre otras, fundamentales para la transferencia de custodia y fiscalización. - Gestión de incertidumbre de la medición
Aptitud para calcular, interpretar y reducir incertidumbres, mejorando la confiabilidad de los datos. Aquí es una característica muy técnica, tal como lo define la mima norma: “La incertidumbre de la medición define el rango estimado de errores potenciales. Define un intervalo estadístico sobre el valor de cantidad medido, y, hasta cierto punto, podemos estar seguros de que el valor verdadero se encuentra dentro de ese intervalo” API MPMS 13.3. En nuestras rutinas cotidianas, la incertidumbre es inherentemente humana, según la interpretación de Nietzsche, que puede producir desasosiego o impulsar a la creación de nuevos valores, a la búsqueda de potencia, según la capacidad de respuesta que cada ser humano sea capaz de concederle. - Manejo de instrumentos y tecnologías de medición
Habilidad para operar, calibrar y auditar medidores (volumétricos, másicos, ultrasónicos, etc.) y sistemas de control. Si la formación base del operario, no cubrió estas habilidades, es apropiado que haga un proceso de entrenamiento y certificación que lo ayuden en su idoneidad para este aspecto. - Comunicación técnica efectiva
Redacción de informes, argumentación técnica y sustentación ante auditorías o entes reguladores. Es probable que la organización establezca un estándar en cuanto a estructura del contenido y algunos protocolos repetitivos en los informes. Las demás son competencias que requieren estudio, entrenamiento y práctica. Es recomendable llevar un récord con las horas utilizadas por cada exposición.
6. Ética y responsabilidad profesional
Compromiso con la integridad de los datos, la transparencia operativa y la legalidad. Una buena guía para tener una directriz en esta materia tan sensible, se puede encontrar en la Norma ISO 19011: Directrices para la Auditoria de los Sistemas de Gestión. No se requiere ser Auditor, para entender los lineamientos trazados y son un excelente documento de referencia.
7. Adaptación tecnológica
Disposición y capacidad para integrar herramientas digitales, software especializado y sistemas de monitoreo en tiempo real. Puede facilitar la transformación digital, liderar procesos de mejora continua, traducir la tecnología en valor operativo y reducir brechas entre la ingeniería tradicional y los nuevos modelos digitales. Esta aptitud implica no solo aprender a usar tecnologías emergentes, sino también entender su propósito, su integración con otros sistemas y su impacto operativo y comercial. Este perfil, tiene gran aceptación en los procesos de selección de las empresas.
8. Visión integral del negocio
Entendimiento del impacto económico, legal y ambiental que tiene la medición dentro de la cadena de valor. Aquí se puede entender como un eslabón dentro de toda la cadena de valor del sector energético. Este perfil se puede convertir en un aliado estratégico capaz de tomar decisiones informadas, anticipar riesgos, comunicar con claridad entre áreas técnicas, legales y comerciales y generar confianza a nivel corporativo. Ejercer en procesos de peritaje. En la escala de la alta dirección, será un ejecutivo con una competencia muy aguda para la toma de decisiones difíciles.
9. Trabajo interdisciplinario y liderazgo técnico
Habilidad para interactuar con áreas operativas, legales, comerciales y de control, liderando con conocimiento técnico. Puede ser un buen negociador con estas áreas, inclusive ofrecer espacios conciliadores porque comprende las desviaciones que por diversas razones se presentan en los procesos fáticos. Si se presentan en sistemas automatizados, con mayor frecuencia se pueden presentar entre seres humanos, donde viene muy bien la solución de conflictos y la construcción de confianza.
